Harakiri (Seppuku) | Película

Conmovedora y dramática película que exalta la dudosa moral de determinados valores humanos frente a la vida y los rasgos empáticos.

Título original: Seppuku (Harakiri).
Año: 1962.
Duración: 133 min.
País: Japón.
Director: Masaki Kobayashi.
Guión: Shinobu Hashimoto (Historia: Yasuhiko Takiguchi).
Música: Tôru Takemitsu.
Fotografía: Yoshio Miyajima (B&W).
Reparto: Tatsuya Nakadai, Rentaro Mikuni, Akira Ishihama, Shima Iwashita, Yoshio Inaba, Jo Azumi, Yoshio Aoki, Akiji Kobayashi, Masao Mishima, Ichirô Nakaya, Tetsuro Tamba, Kei Sato.
Productora: Shochiku Kinema Kenkyû-jo.
Género: Drama.
Premios: 1963 | Cannes: Premio Especial del Jurado (ex-aqueo con "Az prijde kocour").


Sinopsis:
La película narra la vida de un samurái y los acontecimientos que lo llevan a practicar el rito del harakiri. Colmado de pobreza tras la muerte de su señor, lo único que le queda es su familia.
Una película donde los acontecimientos se unen para poner de relieve una serie de valores e inamovibles preceptos que anteponen el honor y la tradición a la auténtica vida y dignidad humana.


Opinión personal:
Aunque al principio podía parecer una película aburrida, poco a poco  va rompiendo esa expectativa y abriéndose paso en la atención. No os dejéis engañar por que sea japonesa y antigua, dista de la imagen que tenemos preestablecida de esa clase de pelis.
En cuanto a la trama, supone el pilar fundamental de una obra en la que no tiene lugar destacar la banda sonora o efectos especiales de ningún tipo.
Resulta llamativo su tono de pesadilla a ratos, logrando transmitir una tensión muy lograda. Esto se ve también favorecido por una buena interpretación  gestual de los actores.

En cuanto a la coreografía de los personajes, se consigue una sincronización perfecta, aunque en contadas ocasiones, poco creíble.
Su narración te adentra en la historia sin problemas, organizando el argumento de forma que no deja cabos sueltos y lo desvela todo en su debido momento. Podemos encontrar asimismo un uso muy adecuado del tiempo narrativo y un "paseo" entre personajes ideal (intercambio, perspectivas).

Su crítica se puede extrapolar a la sociedad occidental actual. Esa crisis moral que enaltece la adquisición económica y antepone los intereses personales a la sensibilidad y la empatía es algo lamentablemente muy presente en casos de nuestro tiempo. En la película se expone mayormente el arraigo cultural y tradicional como máximo exponente del honor y la dignidad. Este film te hace sentir fácilmente identificado con cada personaje y motivo, resultando ácido y penetrante en su mensaje. Creo que es por ello por lo que principalmente lo recomendaría.

Es ideal para todos aquellos aficionados al cine japonés y su cultura en general, pero también para todos aquellos que pretendáis ver una película con mensaje y fácil de entender. 


Valoración:
Personalmente, me ha gustado más de lo que esperaba. No obstante, soy consciente de que quizás no guste a un público demasiado amplio. Valoro muy positivamente su mensaje y su forma. Por todo ello, le doy:

Recomendada con escasas excepciones.

***

Pues esto ha sido todo. Espero que os haya gustado mi crítica y, si veis o habéis visto la peli, me dejéis un comentario abajo con vuestra opinión.
También me gustaría mucho que me dijeseis pelis para exponer en futuras entradas del blog.

Y cambiando un poco de tercio: ¿Cuál es tu peli favorita? ¿Cuál es la peor que has visto nunca?

Y como siempre, daros las gracias por estar ahí y formar parte de todo esto. Nunca me cansaré de decirlo (o sí... pero no de pensarlo).
Un abrazo muy grande y...

¡Hasta la próxima!